Mindfulness significado y ejercicios. EL mindfulness es la atención plena, atender con todos tus sentidos, sin juzgar, solo aceptando tus pensamientos. Esa atención plena en el momento presente sin juicios, sería su definición más sencilla.
Esto tiene muchísimas connotaciones, al final vivimos tan deprisa que nos puede la ansiedad. Cuerpo y mente deberían de estar en equilibrio, pero a veces nuestra mente está o bien en pensamientos del pasado, o bien en pensamientos futuros, lo que supone un desequilibrio, ya no tenemos esa armonía y con el mindfulness lo que se intenta es trabajar el momento presente, en el aquí y ahora.
No es tarea fácil, a lo largo del día se sabe que tenemos en torno a unos 60 ó 70 mil pensamientos, muchos de ellos del pasado y otros del futuro; preocupaciones sobre todo ahora con la situación que vivimos.
Hay que intentar observar nuestros pensamientos desde un punto de vista de espectador, para dejarlos fluir, para dejarlos marchar. Porque si dejo que me que me influyan es cuando ya me engancho a una emoción, a una preocupación que genera ansiedad.
“Que todo fluya y que nada influya”, los pensamientos son pasajeros, tienen que ser dinámicos entran y salen de tu mente, el problema viene cuando entran, pero no salen y no nos permite conectar con nuestro presente.
Mindfulness significado y ejercicios
Se puede practicar a cualquier edad, desde niños hasta ancianos. Atención plena al presente con los cinco sentidos, ser consciente de nuestra respiración, la idea es poner el foco de atención en un punto de la respiración, a base de entrenar y entrenar, con la práctica diaria. Para así, poco a poco, conectar con tu respiración, aspirar el aire por la nariz, dirigirlo hacia el estómago poniendo tus manos en él, notando como se infla y expulsarlo por la boca. Son ejercicios que sólo requieren de tres minutos o cinco al día, no hace falta más.
Si mientras respiramos, vienen pensamientos a la mente, los tratamos como observadores, y los dejamos fluir para que desaparezcan, contando unas 10 respiraciones conscientes y si algún pensamiento te despista, debes volver a empezar.
Normalmente se recomienda un mínimo de ocho semanas de prácticas de mindfulness ejercicios de respiración consciente. Es algo diferente a la relajación y la meditación; la relajación es más bien para calmar tu sistema nervioso simpático, cuando estás activo, cuando estás en alerta o en tensión muscular.
Y la meditación, es más bien para lograr un estado de atención centrada en un pensamiento o en un sentimiento.
Todas se complementan, igual que cuidamos el cuerpo yendo al gimnasio, debemos cuidar nuestra mente, obtendremos así muchos beneficios. Hay numerosos estudios neurocientíficos que lo avalan y a día de hoy, se sabe que nuestro cerebro cambia de estructura, tiene neuroplasticidad. Por ejemplo, con una práctica continuada de mindfulness ejercicios de atención plena, vamos trabajando partes de nuestro cerebro que guardan las áreas cognitivas, que es la zona prefrontal donde está el neocórtex, calma la ansiedad, mejorando así la concentración, la memoria, el autocontrol emocional y la inteligencia emocional.